"La punta del iceberg", en Zaragoza, Cine-Foro "Muerte digna"

El 19 de septiembre, en el ciclo "Cine y muerte Digna" promovido conjuntamente por Fundación Vivir un Buen Morir y Fnac Zaragoza, se proyectó la película "La punta del Iceberg"

El pasado lunes 18 de septiembre se proyectó la tercera película del ciclo promovido por Fundación Vivir un Buen Moriren colaboración con FNAC, con aforo completo y posterior debate al finalizar la película.

Moderado por Maria José Ochoa, coordinadora del ciclo y colaboradora de la Formación FVBMque se está desarrollando por todo el territorio español.
La película elegida en esta ocasión fue " La punta del Iceberg", donde se reflexiona sobre las repercusiones de trabajar en entornos muy competitivos y con enfermos, donde el trabajador sólo es un número y como en el caso de la película, las muertes por suicidio son silenciadas.

Compartimos las conclusiones del interesante debate surgido al finalizar la película:

  • Las muertes por suicidio siguen considerándose un estigma y no se habla de ellas, sobre todo en entornos laborales tan competitivos como el que refleja la película.
  • El sentimiento de culpa está muy arraigado en los supervivientes, que se castigan pensando que podían haber evitado la muerte de su ser querido. El silencio genera síntoma y tiene presencia aunque no se hable.
  • Necesidad de afrontar nuestros propios miedos ante la muerte, y la importancia de formar a los más jóvenes en competencias emocionales que les permitan tener los recursos adecuados para afrontar las situaciones adversas y de crisis.
  • La crisis económica ha provocado una crisis de valores, por eso es fundamental la formación humanística y espiritual. Se vivie en una sociedad tecnificada que propicia el aislamiento y la incomunicación.
  • Las muertes por suicidio son una de las principales causas de mortalidad en las sociedades desarrolladas, y se está produciendo un incremento de muertes por suicidio en personas muy jóvenes y ancianos; éstos últimos han de afrontar múltiples pérdidas al final de sus vidas.
  • Adoptar una actitud respetuosa y empática hacia quien ha perdido a un ser querido, en el caso de muertes traumáticas. No hay víctimas, hay afectados.
  • Si en una familia hay antecedentes de suicidio es posible que pueda repetirse en algún miembro de la familia.